Toma nota de los 7 consejos que acercan los educadores para enseñar a pensar analíticamente.
Enseñar a pensar críticamente es una parte integral de la docencia, sin importar el tipo de asignatura que enseñes.
Si eres un docente recién graduado y tienes poca experiencia implementando prácticas que incentiven el análisis diferenciado, checa algunos consejos.
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1 – Pregunta Constantemente
Cuestionarse los hechos y las afirmaciones es fundamental para pensar de manera crítica. Debes crear un ambiente que nutra la curiosidad intelectual y fomentar las preguntas.
Al principio puede que formules la mayoría de las preguntas para demostrar el tipo de preguntas que llevan al pensamiento más profundo y a la comprensión. Puedes incluso optar por responder mal algunas de ellas para explorar la manera de pensar de los estudiantes. Entonces pregunta cosas que los lleven en distintas direcciones. A medida que comprenden la dinámica y se sientan más cómodos y habilidosos, sus preguntas orientarán las discusiones de clase.
2 – Empieza con una pregunta inicial y ayúdales a analizar el argumento
Elabora una pregunta interesante para crear un argumento en torno a ella y ayuda a tus estudiantes a desglosarlo. Identifica los términos subjetivos o ambiguos y defínelos claramente. Una vez que lo haces verás que tus alumnos podrán buscar y encontrar evidencia relevante a su argumentación.
3 – Bríndales herramientas para poder introducirse en la conversación
A principio de año asegúrate de acercar un listado de expresiones y conectores que les ayuden a adentrarse en la discusión y desarrollar su proceso de pensamiento a través del análisis del argumento: Estoy de acuerdo/ en desacuerdo porque…, Comparto tu punto de vista… ¿Puedes explicar lo que quieres decir con…?, etc.
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4 – Modela tus expectativas
De acuerdo con los docentes, todo se reduce al modelado. Si tus expectativas son de conducta, el modelado puede resultarte muy útil. Acércales modelos de discursos, tanto positivos como negativos que les ayuden a formar su manera de argumentar y pensar críticamente.
5 – Discusión: Incentiva la controversia constructiva
Las discusiones vivaces suelen involucrar diferentes perspectivas. Puedes incluir un intermediario o modulador para que dirija la discusión, y proveer a los estudiantes de temas controversiales para que discutan, pero asegúrate de antes aclarar la manera en que deben expresarse, y cómo estar respetuosamente en desacuerdo.
6 – Escoge contenidos que interesen a los alumnos
Es importante optar por temáticas que atraigan a los jóvenes y sean relevantes a su situación y la época en la que viven. Se debe tratar de temas que los motiven a participar, investigar y querer activamente debatir sobre ello.
7 – Fabrica discusiones Socráticas
La discusión al estilo Sócrates supone un método de interrogación donde los participantes se preguntan entre sí para evaluar la lógica del otro y entender mejor o clarificar conceptos. Esto les da la oportunidad de desafiarse intelectualmente. En esta modalidad los docentes solamente observan el desarrollo.
Exelente información para enseñar a aprender